Instituto 1 - Belgrano 3

Luego de expulsar un poco la bronca, de pegarme un baño frío, hago un mini-análisis del partido de hoy. Belgrano ganó merecidamente, ante un Instituto superior en el primer tiempo, pero perdido en el segundo.

El primer tiempo mostró a Instituto manejando el balón en territorio celeste, no creando claras situaciones de gol, pero manejando el partido a su antojo ante un mezquino planteo de Ferraro. A los 21 minutos de juego, una gran jugada del mejor jugador de la cancha, Matías Suarez, puso el 1 a 0 transitorio para el equipo celeste, en el primer ataque para ellos. Desde ese momento, Instituto perdió las riendas del partido, el nerviosismo de los jugadores se notó, pero a los 35 minutos, después de una pelota parada y de un error infantil de Olave, la gloria marcó el empate, a través de Matías Saad.
A los 40 minutos, Juan Casado convirtió un contraataque de Córdoba Celeste en gol. 2 llegadas, 2 goles para el equipo de Ferraro, una gran efectividad.

El segundo tiempo mostró a un Instituto apagado, sin ideas y con un nerviosismo que hacía recordar el pésimo campeonato pasado. Belgrano esperaba parado atrás, defendiendo muy bien cada pelota y luego saliendo de contra. Instituto tuvo el empate de cabeza, pero el árbitro Bongianino lo anuló por una falta en ataque (que no pude apreciar si fue o no). Así, el tiempo fue pasando y el ímpetu de algunos juveniles de la gloria crecía, para luego mostrar a un Nery Lima yendose expulsado por una fuerte entrada. A los 27 del complemento, Matías Suarez nuevamente puso el 3 a 1 definitivo, cifra que pudo aumentar tranquilamente para la empresa debido a las claras llegadas de contra que tuvo.

Mucho no se puede decir, es un resultado contundente. Ahora hay que revisar ciertas cosas, como la defensa, que siempre se vió superada por la velocidad de los delanteros celestes. La delantera también estuvo floja, no se si era preferible que comience de arranque Silvio Romero o José Sanchez por Daniel Jimenez. Pero bueno, el partido ya terminó, ahora hay que olvidarse y empezar a pensar en la otra PyME.